domingo, 22 de febrero de 2009

il est tombé, il est mort... esas fueron las palabras al inicio de la clase (razón por la cual ahora tomo clases en el cuc de odontología, pero no vine a escribir de eso hoy), sin embargo, fue la manera en que lo dijo lo que resulto aun más extraño, más ajeno y provocador. Por una parte esta expresión hizo que me sintiera bien conmigo mismo por el simple hecho de poder comprenderla, sin dudar, y asimiliarla al momento; pero al mismo tiempo fue este modo de enuncación que resaltó por su extrañeza, a diferencia de haberlo dicho en español o en inglés(he falled and died). Curiosamente, mientras charlaba con Polo después de clase, llegamos a la conclusión que la muerte, así como el erotismo junto con la mística, es decir las experiencias límites, conforman el problema del lenguaje y de los límites de su expresividad. Y pareciese que la muerte conforma el horizonte de sentido del hombre, incluso más que la vida, debido a su inminencia constante y patente... Es éste una vez más el terreno de lo unheimlich, aquello que se presenta como familiar y siniestro a la vez, y que tantas veces ha rondado por mi cabeza y mi alcoba. Pues no existe nada más amenazador que la muerte, nada más certero pero siempre conocido a través del cuerpo del otro; sin embargo nunca en carne propia...

Post-Scriptum
Ayer, 21 de Febrero, fue el día internacional de la lengua materna, lo que me resulta particularmente extraño al saber que es algo instaurado por la ONU con la excusa de "promover el multilingüismo y la diversidad cultural", pues esto necesariamente implica la imposición de una lengua materna sobre otra, o bien, de una tercer lengua en cuestión sobre las dos anteriores. El punto es que no veo la relación entre celebrar la lengua materna y el diálogo intercultural por las razones ya enunciadas, pues me parece que éste apela a la extraña figura utópica del monolingüismo. Sin embargo no niego la importancia de la lengua materna, aunque la frase que me hizo escribir estas lineas (Rodrigo habla español...) me resulta ajena en la medida que siempre hablamos otras lenguas, e incluso cuando esto no sea cierto, la historia de las lenguas será siempre una historia llena de heridas sin sangre, de invasiones, de marcas e intervenciones; ya sea del árabe en el español, del español sobre el nahuatl y doscientas lenguas indígenas más, del inglés en el francés o incluso del inglés al español, no existe ni existió jamás una lengua materna pura, un monolingüismo de lo Uno que podamos re-apropiarnos...


8 comentarios:

Santiago Quetzalcóatl dijo...

La semana pasada fue la semana de "todos a recordar a Darwin" Y no habría Darwin que recordar sin "El origen de las especies". Esta semana a recordar a las lenguas maternas. ¿Qué tipo de especie son las leguas? Hay un ancestro común para el ser humano y la lengua. ¿Dónde surge pues la lengua y porqué los lingüistas han desarrollado una suerte de darwinismo para explicar el desarrollo de esta ? ¿Acaso estamos en la fiebre "todo explíquese por selección natural-artificial"? La pregunta "científica" en este caso sería ¿El neandertal ya poseía una lengua? ¿Es esta lengua la ancestra común a las lenguas humanas?
Desde luego sé que la lengua materna, es materna a un individuo. En ese sentido poco importa genealogía de la lengua. Justo lo que sobresale es el individuo y su origen, la madre. Y así se logra el efecto de incorruptibilidad. Una lengua MATERNA no puede ser, nunca, puta. El origen del individuo, en tanto individuo lenguado, resulta, a pesar de la evolución, incorruptible. ¿Qué pasa pues con la lengua paterna? Lo Uno recae en lo materno y no en lo paterno. Y eso Uno, no puede ser más que del in-dividuo.

grafo dijo...

En efecto, la muerte nunca se siente, por decirlo así, en carne propia.. no obstante, hay algo de muerte (esto es, de limite y finitud.. de condicion en general, pero sobre todo de condicion humana) en ciertos cuerpos.. no propios, por supuesto, pero no precisamente ajenos... para empezar, en el cuerpo de la lengua: en esa frase que comentas... y también en el "propio" cuerpo, en tanto que cuerpo erogeno y cuerpo enfermo... La enferemedad (y la medicina) no pueden adquirir sentido sin ese "horizonte" que es la muerte, sin esa tendencia y lejania obtusa que ostentan con ella... Finalmente, en el cuerpo en general, en la medida en que "cuerpo" deba referirnos a una delimitación (desde el cuerpo geometrico) y por tanto implique un ejercicio del limite que se debe, en ultima instancia, a ese limite radical que es la muerte..

PS.
Rresulta morboso y comico pensar que, desde Newton, la ciencia liga las caidas con los cuerpos y, en esa medida, una vez mas con la muerte... al menos en el caso de este compa, que de no tener un cuerpo no hubiera ni caido, ni muerto..

Sebastiana dijo...

A mí, la verdá, la verdá... siempre me ha causado un como no sé qué la expresión "lengua materna". Es demasiado gráfica, como cuando tienes la cara toda llena de mugre a los 5 años y tu mamá decide que es buena idea limpiarte con baba... porque eso no es lo suficientemente humillante, de por sí, como tener la cara llena de mugre: "pareces niña de la calle!". Pero no tengo traumas! jajajajaja.

Nocierto, ya voy a decir algo menos baboso (get it!?). Dios, qué me pasa?

Así que la lengua... no sé por qué tiene un día especial. No me parece, aunque quizá deberíamos intercambiar como diccionarios... Sería una buena práctica, qué te parece? Así podemos apropiarnos de listas interminables de sustituciones imposibles (posibles).

You know what I think of language...

Lidia dijo...

Eso de experimentar la muerte a través del otro me recordó a Heidegger, ese único fragmento que leí de el ser y el tiempo (eso te lo comenté).

Eso que dices de la lengua... lo que aprendí esta semana sobre la lengua materna es que siempre contarás en tu lengua materna. Estaba jugando con Lana y Niki Mensch! Ärger dich nicht (Caray! no te enojes), una suerte de parcasé alemán, y al contar las celdas que avanzaban nuestras fichas, cada quien contaba en su idioma: Lana ruso, Niki: alemnán (obvio, aunque ya sabe contar en ingles y español)y yo, pues en español. Supongo que es la que se lleva enrraigada, con la que siempre te senitrás a tus anchas, con la que al fin y al cabo, mejor te puedes expresar, es la que entiendes y la que te entiende.

Anónimo dijo...

definir es limitar

Omar Sánchez dijo...

Claro que se celebrea el monolingüísmo, la imposición de una lengua sobre otra, pero no podemos negar una realidad de la cual todos y cada unaa de las culturas es partícipe, del hecho de que una lengua recae bajo herencia a partir de un dogma preestablecido de la misma, que viene dado por una historia de imposiciones que de otra manera harían imposible el acto de la comunicación.

Jesús García dijo...

Bataille razona, en su tratado de "El Erotismo", de la proximidad del éxtasis erótico y de la entrega religiosa. Y no es casualidad que ambas experiencias estén ligadas a la violencia (por ser momentos únicos de desprendimiento, de fusionarse y convertirse en un ser continuo). Así pues, el límite que representan estos eventos en realidad se desvanece... Independientemente de las palabras. Lo que permanece es el gesto... ¿No será ésta la lengua única? Quien sabe...

pezazul dijo...

me dejaste pensando mucho en el "purismo del lenguaje"... la lengua materna viene a ser destruida o re- construida (a caso de- connstruida)por cada individuo por el simple hecho de estar vivos... estar vivos implica morir también... el lenguaje nace (madre)... y muere (se transforma)